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domingo, 3 de diciembre de 2006

Mis poesías

Historias de almas ocultas en roperos




Una vez creí capturar la magia de un amanecer de azules y rosados
en el horizonte de una cálida mañana de marzo;
y se escurrió lenta ante la noche de mi día.
Una vez busqué mi alma entre las páginas de un libro
y la encontré dormida en el ropero.
Una vez creí ser hombre con un beso, y amanecí en tu cuerpo,
temeroso como un niño.
Una vez soné con el amor en tu mirada y sentí dolor, angustia y desconcierto.
Y más allá de muchos " a veces", de amaneceres de mi alma entre las páginas del día,
de largas siestas en tu cuerpo.
Entre el dolor, de polizón en tu sonrisa, y algún silencio reprimiendo el deseo;
hay otras cálidas mañanas de marzo, de silenciosas almas, ocultas en roperos.


Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)


Tal vez




Esta es una canción que escribí hace... Pero no es lo único que no recuerdo, puesto que tampoco me vienen a la mente los acordes.


Tal vez alguna vez pueda ver más de lo que ahora veo
y no me importe el tiempo si lo pierdo.
O escuche lo que no me dicen tus palabras
y así hablarte, despacio, en silencio.
Tal vez alguna vez entiendas estas frases
y así los dos sin hablar conversaremos.



Solo tal vez...


Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)


De la lluvia y los poetas




No puedo evitar, el dejarme seducir por los misterios del alma femenina.
Cual dulce dolor de un amor a destiempo, embriaga las fibras más íntimas de mi espíritu
y rasga a jirones mi corazón: el aroma indiferente de un amor antiguo, de un amor de siempre.
Como un poeta, garabateo tu imagen en mi mente. Cuál hábil artista, coloreo cada palabra en tu cuello.

Pienso que el amor, cual cruel verdugo del alma, sonríe debajo de su capucha,
al mismo tiempo que deja escapar una lágrima de compasión por los amantes.
Una mañana plomiza de lluvia se escurre en tu pelo. El viento sopla aromas difusos.
Tus ojos, en un intento desesperado de comprensión, pincelan la atmósfera de violetas y verdes reflejos.

En la calidez de tu cuerpo, me echo a un total abandono.
Me desentiendo de mi mismo y puedo sentir tus miedos.

A tres calle de aquí, aún llueve sobre los bostezos del día
mientras las nubes dibujan curiosas figuras en el cielo,
como una fotografía opacada por el tiempo.


Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)


Si tan sólo estuvieras aquí




(Fotografías de: jaxmany, tentertymedia y david)


El viento sopla entre la hojas de un viejo álbum de fotografias.
Quiero recordarte pero... ya no sé como hacerlo.
Nadie anda en la calle a esta hora y este calor reseca hasta el alma.
¿Sabes?,este silencio puede volver loco a cualquiera.
En una habitación de algún hotel barato,
alguien se lleva el caño a la sien y gatilla...
...un fuerte estruendo y luego...
...nada.
El amor le cobró la deuda a otro tonto...nadie llora.
Si tan solo estuvieras aquí.


Me dejo quemar los dedos por el cigarrillo
para mantenerme despierto.
Pronto van a dar las tres y parece que va a llover.
Mil imágenes cruzan frente a mí como demonios en danza macabra.
Ya no recuerdo tu piel quemando mis labios.
Ya no siento tus dedos clavándose en mi espalda, y la soledad,
como una aguja caliente, se hunde en mi pecho.
Es curioso cómo el dolor puede hacer más dulce el deseo.
Si tan solo estuvieras aquí.


El odio es dulce. El amor una daga que abre la herida.
El sexo un disparo que estremece la carne.


Enciendo otro cigarrillo y la llama del encendedor
espanta a las sombras de la habitación
como a animales aterrorizados.
Ya está lloviendo sobre el caliente asfalto
inundando el aire con olor a lluvia.
Cada vez que cierro los ojos puedo verte sonreir esa tarde de Agosto,
pero tu rostro no es el mismo.
Y puedo sentir a mi corazón latiendo dentro mío
como el de un niño asutado corriendo por su vida.
Sé que tus ojos son la salida, pero ya es tarde para imaginarlos.
Si tan solo estuvieras aquí.


Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)


N.R.: En un principio a esta poesía la escribí con toda la intención de ponerle música. Pero me imagino que sabrán cual fué el fin de la historia.
Les he mostrado el backstage de "Si tan solo estuvieras aquí". Esto iría como un bonus track.


Quiero




(Dibujo: Tsutomu Nihei)


Quiero verte bailar dentro de un oscuro cuarto,
alrededor de los cadáveres de mis hermanos muertos,
guerreros silenciosos de una guerra perdida,
poetas ciegos de una ciudad que silenció sus voces,
y devoró su carne, sus ojos, sus almas.
Quiero verte llorar en un día gris
y beber tus lágrimas mezcladas en la lluvia,
que queman como ácido en mi boca,
que seca el corazón de un niño,
que vela tu imagen en mis retinas.
Quiero escucharte maldecir por aquel que jaló del gatillo,
que aniquiló tu deseo y te convirtió en la amante frígida,
de los que pagan por amor y unas palabras vacías.
Quiero verte arrastrar en la carroña de las calles sin nombre,
comiendo las entrañas de los hombres sin sueños,
riendo nerviosa, callando tu ira.
Quiero sentir tu tristeza como mía,
y reir contigo, llorar en la lluvia,
maldecir al sicario de tus penas y las mías.


Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)


Un septiembre en tu cuerpo




Siete minutos para amanecer en algún lugar de tu espalda,
mientras septiembre se despereza sobre los jazmines del patio
y una rezagada y débil brisa de invierno recorre tu cuello.
Los años han sido sabios en tu cuerpo,
moldeándolo hábilmente hasta el último detalle,
convirtiéndolo en el refugio perfecto de mis manos,
en el tibio y húmedo paraje de mis labios,
en el campo de batalla del deseo.
Qué fácil es engañar al corazón sobornando los sentidos.
Tres fantasmas bailan en la calle,
Hiroshima, Vietnan, Nicaragua,
mientras la pobreza y el amor desgarran a jirones
el alma de un indigente en un callejón.
En el espejo de la habitación, el cielo estalla en un rojo Napalm
alcanzando todo a su alrededor.
¿Quien no sintió alguna vez el deseo de ponerle fin a todo?,
pero la razón, a veces, nos dispara a quemarropas.
Extiendo mi mano, y con mi dedo índice dibujo el contorno de tu rostro,
y por un momento me siento tan sabio como el tiempo.
La seducción es como un gran chinese's puzzle:
Cada palabra, cada gesto, cada mirada,
encaja perfectamente en cada instante que estamos juntos,
en el septiembre de tu cuerpo.

Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)


Mensaje subliminal (Canción infantil)




Pisa pisuela, color de ciruela...


Recorrí tu cuerpo a la deriva con mis dedos.

Sobre el puente de Avignón todos bailan y yo...

enfrenté valiente el oleaje de tus senos.

Mambrú se fue a la guerra, ¡qué dolor, qué dolor...!

Me así con fuerza un momento de tu cuello.

Dos y dos son cuatro, cuatro y dos ...

pero me arrastró la corriente del deseo.

Que sepa tejer, que sepa bordar...

Y nadé sin descanso hasta tu vientre,

Cu cú cantaba... debajo...

donde recobré mis fuerzas un instante;

Dónde vas carbonerito? Dónde...

...el remolino tibio entre tus piernas


Lobito Lobito qué estas haciendo...?

devoró mi carne y las esperanzas...

Naranja dulce, limón partido...

de sobrevivir al naufragio de tu sexo.



Y el que no se escondió.... colorín, colorado.


Gabriel Parrinello (Codename: steppenwolf)



En el otoño de un amor




En el otoño del amor, cuando descansa el dolor sobre un colchón dorado de recuerdos.

En el abril de un beso. En la mirada de una pasión lejana, mientras el sol calienta tímidamente la piel.

En un intento desesperado de arrancar el deseo en una caricia,

me dejo atravesar por brisas nuevas. Me seducen viejos nuevos aromas.

Cada gota de lluvia trae implícita cientos de gotas, así como, cada nueva mirada es una antigûa mirada.

Acaso, ¿no tuviste alguna vez la impresión de haber conocido a alguien, pero en esa ocasión llevaba vestido otro cuerpo?

A veces creo que no somos individualidades, si no, caprichosos pellizcos de un todo.

Y en la multiplicidad de nuestras almas, llevamos los sueños, las realidades y fantasías, la risa y el llanto de otros.

En el otoño de tus hombros se pierde mi mente, entre los colores pasteles de la tarde.

Y aunque nuestros cuerpos se entrelazan con la misma pasión; tu cuerpo sabe distinto. Tus manos son la de otra persona. Y me siento un extranjero en un país desconocido.

Y es así, como una misma palabra, a la que escuché cientos de veces, me resulta extraño su significado.

La fría tarde se escurre lenta por la ventana del cuarto, y me quedo observándola en silencio.

Como un auto reflejo se dibuja una sonrisa en mi rostro al intentar recordar otras tardes.

Pero es un gesto carente de contenido. Cierro mis ojos, y procuro no pensar en nada.

Sólo me entrego al sueño, en el otoño de un amor perdido.


Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)


Requiem








Déjame decirte algo que quizás no quieras escuchar;
pero cuando el frío de la soledad apriete tu garganta,
pensarás en mí.
Puedes esconderte en otra ciudad, cambiar de identidad
y hasta de cuerpo.
Pero cuando el tiempo ya no calme el dolor,
pensarás en mí.
Cuando los fantasmas del pasado comiencen a asecharte,
para apuñalar tu alma, y el oscuro filo de las sombras
te hiera la piel.
Tarde o temprano, pensarás en mí.
Podrás refugiarte en las tenues tardes de abril de cualquier sitio.
Contar historias que no son reales. Pero cuando ya nadie te escuche,
pensarás en mí.
Verás decolorarse alguna tarde desde el ático.
Leerás algún versículo de tu Biblia en silencio.
Pero cuando las palabras suenen vacías en tu mente,
pensarás en mí.
Mirarás el reloj sin importarte el tiempo.
Cerrarás la puerta detrás de tí, y no escucharás
a nadie llorar en tu entierro.
Y cuando la cálida tierra abrigue tu cuerpo,
y la soledad ya no importe, y los fantasmas se desvanezcan con la suave brisa de la mañana.
Te habrás convertido en un recuerdo para alguien.


Gabriel Parrinello (codename: steppenwolf)